Playbook, Ipad, Samsung Galaxy Tab y cientos de otras son las que están
en el mercado. Mucho se ha dicho sobre si estos dispositivos dominarán
el mercado y reemplazarán a las pc portátiles. Hay estudios publicados
en Internet sobre el uso que se le están dando a las tablets. Se compara
el boom de estos dispositivos con la llegada del televisor y si es
posible que en cada hogar del mundo exista una tablet. Ya se habla del
crecimiento exponencial en la fabricación de smartphones que todos los
días se multiplica. Las famosas tabletas llegaron para quedarse y el
sistema operativo Android, del gigante Google, amenaza a Apple
seriamente. Sin embargo, creo que es demasiado pronto para decir que
sustituirán a las pcs. Todavía las tablets son demasiado incómodas
incluso para algo tan sencillo como copiar y pegar. Escribir en ellas es
algo complicado y digno de querer sufrir de artritis en cualquier
momento. Las tablets son un gran complemento para la onda "output" es
decir, para ver, ojear, leer, jugar, buscar… pero para hacer "input" es
decir; escribir, actualizar portales, programar, siguen siendo muy malas
e incómodas.
Creo que no todo está dicho en el mundo de las tabletas. Llegarán las tablets 3D. Llegarán las que hasta te cuidarán a tus niños remotamente pero seguramente no tardarán en complicar un elemento tan sencillo y necesitará más memoria RAM, más procesador, las APPS se complicarán y nacerá una nueva tableta con super procesador. Porque al final los grandes fabricantes no se están dando cuenta que estamos volviendo a la sencillez, a esa que nos dejaba boquiabierto cualquier juego de atari 2600. Veremos nuevos pac−mans, volveremos a la esencia y quedará siempre la duda si las tablas, que fueron creadas para "leer libros y periódicos" se convertirán en los Nintendos DS o el PSP que todo adulto quiso tener o si realmente evolucionarán a algo más sofisticado que nos permitirá imprimir, programar y realmente sustituirá a las pc portátiles con la sencillez que siempre nos ha caracterizado como seres humanos.
La guerra de las tablets apenas comienza y el Ipad de Apple y la Samsung Galaxy Tab ya se enfrentaron en sus primeras batallas. La Blackberry Playbook no se vende porque no es independiente del celular Blackberry y las otras no son tan buenas como las dos primeras. Pero la moda es tener una tablet. Yo tengo que volver a agarrarle el gustico porque les confieso que al principio me enfiebré con ella, con sus juegos y sus apps, pero hoy en día me parecen un buen complemento. Hace varios días que ni cargo la pila de mi Galaxy Tab porque simplemente es un elemento prescindible. Sin embargo, del Blackberry no me he podido despegar todavía y no dejo de cargarle su pila religiosamente.
fuente : Hernán Porras
Creo que no todo está dicho en el mundo de las tabletas. Llegarán las tablets 3D. Llegarán las que hasta te cuidarán a tus niños remotamente pero seguramente no tardarán en complicar un elemento tan sencillo y necesitará más memoria RAM, más procesador, las APPS se complicarán y nacerá una nueva tableta con super procesador. Porque al final los grandes fabricantes no se están dando cuenta que estamos volviendo a la sencillez, a esa que nos dejaba boquiabierto cualquier juego de atari 2600. Veremos nuevos pac−mans, volveremos a la esencia y quedará siempre la duda si las tablas, que fueron creadas para "leer libros y periódicos" se convertirán en los Nintendos DS o el PSP que todo adulto quiso tener o si realmente evolucionarán a algo más sofisticado que nos permitirá imprimir, programar y realmente sustituirá a las pc portátiles con la sencillez que siempre nos ha caracterizado como seres humanos.
La guerra de las tablets apenas comienza y el Ipad de Apple y la Samsung Galaxy Tab ya se enfrentaron en sus primeras batallas. La Blackberry Playbook no se vende porque no es independiente del celular Blackberry y las otras no son tan buenas como las dos primeras. Pero la moda es tener una tablet. Yo tengo que volver a agarrarle el gustico porque les confieso que al principio me enfiebré con ella, con sus juegos y sus apps, pero hoy en día me parecen un buen complemento. Hace varios días que ni cargo la pila de mi Galaxy Tab porque simplemente es un elemento prescindible. Sin embargo, del Blackberry no me he podido despegar todavía y no dejo de cargarle su pila religiosamente.
fuente : Hernán Porras
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